A 10 años de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, la búsqueda de justicia sigue siendo una deuda pendiente en nuestro país. Como organización comprometida con la promoción de la ciencia al servicio del pueblo, queremos manifestar nuestra profunda indignación ante los hechos que envolvieron a estos jóvenes y la falta de respuestas claras, contundentes y transparentes.
La ciencia se basa en principios fundamentales, y uno de los más importantes es la búsqueda de la verdad. El proceso científico no avanza sin rigor, honestidad y decisiones basadas en evidencia. En este sentido, creemos que estos mismos principios deben guiar las investigaciones y procesos judiciales en torno al caso Ayotzinapa. La verdad no debe ser manipulada ni encubierta. Los hechos deben esclarecerse con transparencia, y las víctimas y sus familias tienen el derecho a conocer la verdad y a que con base en esta se haga justicia.
El sexenio de Andrés Manuel López Obrador concluye sin que se resuelva el caso Ayotzinapa. Le exigimos a él, a la presidenta electa Claudia Sheinbaum y a sus simpatizantes que paren de lucrar con el reclamo de justicia y cesen de inmediato de las acciones y declaraciones que buscan generar división entre las madres y padres de los 43. Exigimos también el reconocimiento inmediato de las investigaciones del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes y la labor de los abogados defensores de derechos humanos, contra los cuales el propio presidente ha lanzado una serie de calumnias contrarias a los principios que proclama la autodenominada “Cuarta Transformación”. Denunciamos que la política del gobierno de Morena pretende imponer una nueva “Verdad Histórica”, semejante a la del gobierno de Enrique Peña Nieto, en la que se exime de responsabilidades al ejército mexicano, al que López Obrador ha defendido y lavado la cara en toda ocasión y otorgado un creciente poder económico y control de la seguridad pública, proceso que continuará con el gobierno de Sheinbaum Pardo
El caso Ayotzinapa no solo es un recordatorio de las arbitrariedades y violencias sistemáticas que padecen los sectores más vulnerables de nuestra sociedad, sino que también nos convoca a reflexionar, organizarnos y movilizarnos para exigir verdad y justicia en todos los ámbitos de la vida pública.
Desde Ciencia para el Pueblo – México exigimos que se respeten los principios de transparencia, imparcialidad y justicia. La búsqueda de la verdad no solo es un aspecto central de la ciencia, sino también un pilar esencial para construir una sociedad más justa y equitativa, por lo que no podemos permitir que el silencio y la impunidad prevalezcan. Consecuentemente, nos sumamos al movimiento del campo popular que, gobierne quien gobierne, sigue luchando por defender y ampliar el cumplimiento de los derechos humanos más fundamentales.
¡No hay democracia con desaparecidos!
¡Nos faltan 43 y miles más!
¡Ayotzinapa vive, la lucha sigue!